Este gráfico puede adaptarse a cualquier idea novedosa o diferente de lo habitual. La cuestión está en «El Abismo»
Igual que existe la gravedad y podemos ver sus implicaciones en nuestra vida real. Así como la luz se mueve en línea recta a una velocidad constante (creo que en general).
Este gráfico muestra los porcentajes aproximados de adopción de cualquier idea novedosa, opiniones políticas, productos comerciales, etc. La sociedad o las personas, responden, en general, a este reparto. Las empresas que quieren generalizar un producto usan este concepto de los «early adopters» de forma masiva. En algunos sectores denominan a estas personas «evangelistas»; no tiene connotación religiosa, créeme ;-D
Cualquier empresa o colectivo que quiere promover algo, sabe que se enfrenta a «El Abismo», ese salto entre «adoptadores tempranos» y «pragmáticos». Si consigue saltar ese «Vacío», la idea irá deslizándose hacia su consolidación, por su propio peso, cual duna de arena.
A principios del siglo XXI hablar de «ayuno» era ponerse casi una etiqueta de fundamentalista o chalado en la solapa. En 2023, superado el «abismo», quien no conoce o hace «ayuno intermitente» es que no está en la onda o no sabe cómo funciona la nutrición.
Una frase de Mark Twain recoge esta situación: «Una persona con una idea nueva está loca hasta que la idea triunfa»
Parece emocionante pero cuidado mientras llega el triunfo: te miran con cara de que estás loco o directamente te marginan, a nivel profesional, familiar, local, asociacional, etc …
Así que, en cuanto a ganancia personal o relación con el entorno … «lo más listo, a veces, es parecer tonto».
A continuación te dejo el texto que aparece en el libro, presentándolo:
«Las 50 preguntas y respuestas fundamentales para entender la economía de nuestro tiempo, aprendiendo a dudar y a no dejarse engañar. El título de este libro hace honor a la gran economista británica Joan Robinson, quien decía que el sentido de estudiar economía es «aprender a no dejarse engañar por los economistas». Una advertencia más necesaria que nunca hon en día, cuando los economistas ocupan cada vez más espacio en los medios de comunicación y palabras como paro, deuda, inflación, recesión, pensiones, prima de riesgo o siglas como PIB, IPC o FMI forman parte de nuestro lenguaje cotidiano Éste es un libro crítico, escrito de forma muy clara y amena, que ofrece las pautas para abrir la mente mediante una visión plural de la economía».
Aquí no encontrarás verdades. Encontrarás descripciones del problema y diferentes posibles de abordarlo. Eres tú, con tu pensamiento crítico y tu análisis quien puede optar por unas soluciones u otras o incluso mezclas de ellas.
De fácil lectura incluso para personas sin conocimientos técnicos económicos. De hecho, mejor si no los tienes. Una frase famosa en banca (o alrededor de ella) es: «si no puedes o no sabes explicárselo a tu madre, no lo contrates». Así que aunque parece un texto técnico, es un libro que tendría que ser leído por cualquier persona que viva en un entorno de economía de mercado (es decir, todo este planeta). No porque recoja la verdad sobre el funcionamiento de esta economía, sino porque aporta otra visión o interpretación sobre ella.
En economía parece que la única solución es la neoliberal y eso quieren hacernos creer los que venden esa solución o salen muy beneficiados de ella.
Desde mi punto de vista, el vendedor está en su derecho de intentar vender de esa forma. Es responsabilidad del comprador que no le engañen, buscar relaciones de confianza, asesores de confianza en el medio o largo plazo, etc.
Es posible que sea una actitud difícil en el mundo tan rápido que nos movemos. Sin embargo me parece una actitud más inteligente y recomendable, mejor que «comprar» soluciones económicas muy bien envueltas en papel de regalo, que no resuelven las situaciones, y cuya única finalidad es que vuelvas a comprar lo antes posible (aparte de que el vendedor se compre una casa o coche más grande o resuelva determinadas necesidades personales o de su familia). Eso es su interés, puede que legítimo; pero no el mío.
Voy a ser honrado para quienes no conocen a Juan Torres López: es uno de los economistas de cabecera de Podemos, el partido político español. Este partido político pretendió ser (o se vendió) como transversal y ha terminado siendo de izquierdas, a pesar de que todos respiramos aire y bebemos agua, tengamos las ideas políticas que tengamos. (Aunque te choque que estuviéramos hablando de economía y de repente hablamos de política, por favor, sigue leyendo este artículo.)
Por lo tanto, podemos prever que Juan Torres NO es o no está en línea con el pensamiento económico neoliberal.
Sin embargo, la lectura de este libro es altamente recomendable por:
50 situaciones económicas distintas que nos venden con una única solución (la del vendedor), pero que pueden tener otras interpretaciones, otras posibles soluciones con otras posibles consecuencias. Al menos el autor explica de forma bastante clara cuál es la naturaleza del problema Sólo con esto ya merece la pena.
En muchos de los casos llega a la conclusión de que las soluciones deben ser políticos, no económicos. Aunque también nos la quieran vender así, la economía no es una ciencia empírica sino social. Hay tantos vectores que predecir lo que va a ocurrir o va a hacer la sociedad, simplemente no funciona, por mucho que te lo intenten hacer creer. Es labor tuya saber en quién confías o en dejarte vender determinadas soluciones.
La lectura, al estar dividida en 50 «capítulos» puede hacerse de forma salteada no lineal, en función de lo que te aporte.
Buena parte de esta lectura lleva a la acción. «De acuerdo, no voy a cambiar el mundo. Pero ¿qué puede hacer mi dinero o mis proveedores o mis hábitos de compra o consumo para ser parte de la solución (o más parte de la solución) que del problema?»
Iba a poner aquí un enlace para comprar el libro, pero como al final vamos a acabar en Amazon, sugiero que, si te interesa, lo mires, compres o encargues en tu librería de referencia. De paso seguro que ves otros libros interesantes y seguro que si lo trabajas un poco, hasta puedes tener una charla interesante con el librero o librera, sobre otros libros o temas comunes. Lo online tiene ventajas, pero donde esté el contacto presencial o al menos mientras puedas disfrutar de ello, yo al menos lo disfruto.
Serie inglesa de la BBC sobre el valor legal de las grabaciones de las cámaras de video de seguridad (CCTV footage) en las calles inglesas, como prueba ante un juicio o una acusación. https://ororo.tv/es/shows/the-capture#1
Excelente producción, música, interpretaciones y una trama que evoluciona bien. Seis capítulos que parecen más bien una película ampliamente desarrollada. Especialmente me gusta el personaje de Ron Perlman, Salvatore en «El nombre de la rosa»; vaya transformaciones las de este actor.
El guión refleja muy bien el punto de vista de las personas que intervienen en la situación: sus motivaciones, su interacción con la realidad, las consecuencias de su punto de vista y actos, …
La he visto en Ororo.tv, una web para aprender y practicar inglés. Aunque la primera vez la vi en inglés subtitulada en inglés y español, para entender determinados conceptos legales, ejem, hay que verla en castellano (Amazon Prime). La segunda visión, una vez conocido el desarrollo y el desenlace, permite una interpretación del guión mucho más tranquila y profunda.
En 2022 tiene dos temporadas.
La primera tiene seis capítulos y muestra cuál es el problema, la posible solución y sus consecuencias para los que participan en todo el entorno.
La segunda también tiene seis capítulos. En lugar de combatir la solución dada en la primera temporada, la protagonista se convierte en parte de esa «solución» éticamente cuestionable (¿justifica el fin usar determinados medios?), llevando al límite lo que se puede hacer con esa tecnología si la sociedad no tiene control sobre ella o si cae en manos (o cerebritos) inadecuadas.
Conclusión: cuidado con la tecnocracia o los tecnócratas. Le dan mucha importancia a lo que ellos les dan importancia, pero dejan de lado muchos otros vectores, que también hay que tener en cuenta o al menos poner encima de la mesa y no perder de vista.
Conclusión: problemas complejos requieren análisis y soluciones complejas. Cualquier simplificación es muy peligrosa. Si caes en el lado amable de la solución, estupendo para ti; pero como caigas en el lado perjudicado, tela la lotería que nos ha caído encima.
Conclusión: si una solución simple funciona, sólo es en el corto plazo y dejando muchos flecos. Puede que parezca que funciona, pero la tensión o presión se irá acumulando y tarde o temprano, los «laterales» intrascendentes terminan por hacer reventar toda la estructura.